Texto
presentado en la Octava Edición de la Cátedra
de Administración Pública Dr. Omar Guerrero Orozco
Presentación
A manera de preámbulo refiero los antecedentes de la Guía para restablecer la salud política del
estado, estudio redactado en 1643 por Hayi Jalifa (Hâgî Chalfa, Dustûru’l–’Amel).
Ante la interrogante expresada por el Sultán Muhammed
IV a su Visir y otros funcionarios principales, en relación a la situación del
Sultanato, en cuanto a que, planteaba: “bajo el gobierno de mi padre, que en
paz descanse, así como también antes, los ingresos alcanzaban para cubrir los
egresos, o los sobrepasaba. Si mis gastos no son tan grandes como los de mi
padre y los ingresos son exactamente los mismos, ¿cuál es entonces la causa de
que ahora los ingresos estatales no alcancen para cubrir los egresos y a qué se
debe que vosotros no puedan conseguir el dinero para la flota y otros asuntos
importantes?”
Tras ligeros paliativos ejecutados por la administración turca,
los cuales no surtieron los efectos deseados, se pidió a Hayi Jalifa, Ayudante
de la Cámara Financiera, elaborar el diagnóstico requerido, al que denominó Dustûru’l–’Amel
“Guía para Restablecer la Salud Política del Estado”.
Sultán Muhammed
IV
Tratamiento de la situación anormal de la complexión del Estado y el saneamiento del mal de la penuria financiera
Con este título Hayi Jalifa concluye su diagnóstico de la problemática que vivía el Imperio Otomano en el Siglo XVII. En su informe afirmaba que el éxito de su propuesta de mejora podía ser algo relativamente fácil de lograr, sin embargo, consideraba, estas recomendaciones “son irrealizables por el momento; ya que los hombres preocupados por el bienestar del Estado y que se atienen al derecho, son ahora muy raros; la mayoría de los hombres, al contrario, solamente aspiran a placeres sensuales. Por lo cual la solución de esta tarea se basa en un hombre de la espada.”
Los
males detectados en su estudio, son “el déficit del
tesoro, el número crecientemente elevado del ejército, el exceso de los gastos
y la penuria del pueblo.”
Al respecto, Hayi Jalifa proponía, sin que ello significara
recaudar mayores ingresos a cargo del pueblo, que el Padisha, el Sultán, se
diera a negociar, de la manera que sea, el dinero equivalente a los ingresos
estatales de un año, nombrando a un servidor estatal confiable y responsable
para su administración.
En relación con el segundo malestar detectado, el número excesivo
del ejército, recomendaba proceder de manera inteligente, aplicando medidas de
ahorro en lo que hace a “los regalos para la tropa por diligencia en el
servicio y regalos que se adjudican al tesoro”; con ello, preveía el antiguo
cameralista, terminarían “pronto con su número demasiado elevado y ocasionarán
en poco tiempo una reducción del importe de la paga.”
Por su parte, buscando eliminar el exceso de gastos del Sultanato,
propuso como remedio, primero, reducir los despilfarros de los altos
funcionarios, uno detrás del otro, y, segundo, seleccionar y emplear en los
diferentes departamentos y particularmente en la cámara de contabilidad, a la
que reconoce como “el pilar de la administración financiera” a “personas
inteligentes, religiosas y desinteresadas”.
Finalmente, para enfrentar el problema de la indigencia del
pueblo, el alivio según Hayi Jalifa, consistiría en “reducir un poco algunos
impuestos, uno detrás del otro, aligerando las cargas al pueblo. No se debe
vender ningún puesto por dinero, más bien, se debe dejar en sus cargos a
personas probadas y honestas lo más que se pueda e imponer los castigos
merecidos a los opresores del pueblo. A través de estas medidas, el pueblo
recupera sus fuerzas dentro de algunos años, y el Imperio, cuidado por Dios, se
volverá otra vez al bienestar debido.”
Sultán Solimán el grande
El pensamiento administrativo en la Turquía Otomana
La obra editada por el Dr. Omar
Guerrero Orozco, El pensamiento administrativo en la Turquía Otomana,
incluye cuatro tratados sobre la administración del Imperio Otomano. El primero
fue escrito por Lutfi Pasha en 1542, Consejos para los visires (Asaf
Name); después, se presenta la obra de Koya Beg Tratado sobre la decadencia
del Estado Otomano desde el reinado del Sultán Solimán el grande, publicada en el año 1630; el tercer
documento procede de 1640 y es de un autor anónimo, El libro de los consejos
(Nasihat name); el último testimonio, con el cual se abrió este comentario,
es la obra de Hayi Jalifa Guía para restablecer la salud política del estado
(Dustûru’l–’amel) el cual data del año 1643.
Se trata de cuatro documentos
administrativos elaborados por funcionarios de primer nivel del gobierno turco
Otomano que datan de mediados del siglo 16 a mediados del siglo 17. Para
precisar, y en palabras del profesor Omar Guerrero, se trata de un estudio de
política y tres tratados de gobierno.
Es preciso recordar que el Imperio
Otomano tiene sus orígenes en los mercaderes musulmanes del Califato Abasí que,
con el fin de enfrentar las luchas intestinas contra otros grupos seguidores
del ISLAM y contra cristianos y bizantinos durante el siglo IX, fueron
constituyendo un aparato militar y administrativo que sentaría las bases del
primer Estado Otomano a fines del siglo XIII con el ascenso de Osman I, cabeza
de la dinastía osmanlí u otomana. Durante seis siglos, el Imperio se constituyó
en el punto de confluencias del mundo occidental y oriental, teniendo como
capital a Constantinopla desde 1453 a 1922. Tras la disolución del Imperio, el
29 de octubre de 1923 se fundó la República de Turquía.
Volviendo a los planteamientos
del Dr. Guerrero, nos dice que “Una de las
peculiaridades más significativas del Imperio otomano fue la inclinación de
sus hombres prominentes, entre ellos los funcionarios públicos, por el estudio
de la política y el análisis del gobierno.” En relación a los géneros
literarios más comunes, distingue los tratados de política en los que se
definen los principios políticos y propuestas para los gobernantes, y los
diagnósticos de gobierno en los cuales se analizan los problemas
administrativos del Imperio y se argumentan propuestas para dar solución a los
mismos.
De esta caracterización se tiene como
un relevante estudio de política la
obra Consejos para los Visires (Asafnama) de Lutfi Pasha, preparado
después de 1542, a un año de haber dejado el cargo de Gran Visir. Los otros
tres documentos compilados en esta obra se refieren a Tratados de Gobierno: la obra de Koya
Beg, el Tratado sobre la Decadencia del Estado Otomano desde el Reinado del
Sultán Solimán El Grande, (Risala); la obra anónima titulada El
Libro de Consejos (Nasihat Name); y el trabajo de Hayi Jalifa Guía
para Restablecer la Salud Política del Estado (Dustür al Amel).
Gran Visir del Imperio Lutfi Pasha
Reflexiones
Se trata de obras donde la
preocupación central es la gobernanza y gobernabilidad del Imperio. El
planteamiento es definir estrategias que aligeren el deterioro del Estado
Otomano.
Los intereses que preocupan a los
Sultanes, a los Califas, es cómo llevar felicidad y prosperidad a sus súbditos
y cómo recuperar, si es posible, la fortaleza estatal.
Los problemas están identificados:
-
El déficit financiero del Estado
-
Los excesos en el gasto suntuario de
la corte y el ejército
-
La situación de penuria de la
población
-
El manejo deficiente y deshonesto de
la administración otomana
Con el propósito de retardar el
colapso del Imperio, dado que su proceso vital de deterioro es irreversible, se
concibe como prioritario un programa de medidas tendientes a: reformar la
organización y funcionamiento de la administración; mejorar su desempeño ante los
gobernados; llevar a cabo una gestión eficiente del presupuesto;
profesionalizar al elemento más importante de todo gobierno, a los
funcionarios; implementar un programa de austeridad y manejo honesto de los
recursos de que dispone el gobierno; así como concretar acciones de interés y
bienestar social.
Los textos abordados por el Dr. Guerrero Orozco son consejos para una mejor tarea de gobierno por parte de Sultanes y Visires. Se trata de obras clásicas de nuestra disciplina.
Los textos abordados por el Dr. Guerrero Orozco son consejos para una mejor tarea de gobierno por parte de Sultanes y Visires. Se trata de obras clásicas de nuestra disciplina.
Como tal, requieren ser abordados y
recuperar sus enseñanzas. Estas están latentes, como lo están los problemas
que tratan. Su vigencia tiene un valor tanto teórico como para la vida práctica de
todo gobierno.