jueves, 24 de abril de 2014

Reacreditación del Programa de Licenciatura en Administración Pública de la Universidad de Sonora




Hermosillo Sonora, 20 de abril de 2014

El 25 de octubre de 2007, el Dr. Carlos Sirvent, Presidente de la Asociación para la Acreditación y Certificación en Ciencias Sociales, A. C. (ACCECISO), presentó el dictamen de acreditación del Programa de la Licenciatura en Administración Pública de la Universidad de Sonora, considerando, entre otros aspectos, el “alto reconocimiento social al Programa, estimulando en su comunidad gran responsabilidad en el desempeño de sus tareas. Ello se expresa en una fuerte identidad departamental e institucional y en el marcado sentido de pertenencia.”

Dicho dictamen fue el resultado del proceso de evaluación que esa Asociación realizó de acuerdo con los términos del convenio celebrado con la Universidad en enero 31 de 2007. Con esta acreditación, ACCECISO reconoció que el Programa cumplía con “los criterios, indicadores y parámetros de calidad en su estructura, organización, funcionamiento, insumos y procesos de enseñanza y servicios y que por ello mismo, tiene pertinencia social.”

Previendo la conclusión de la vigencia de la acreditación del Programa de Administración Pública, el 25 de octubre de 2011 se conformó la Comisión de Preparación del Documento de Autoevaluación con fines de Reacreditar al Programa. La conducción de los trabajos corrió a cargo del Coordinador del Programa el profesor Gustavo de Jesús Bravo Castillo y del Jefe del Departamento de Sociología y Administración Pública, el profesor Lauro Parada Ruiz; posteriormente se sumaría el profesor Carlos Castro Lugo, quien entró al relevo en los compromisos a cargo del profesor Parada Ruiz.

La visita de evaluación por parte de los pares evaluadores comisionados por ACCECISO, se llevó a cabo el 14 y 15 de noviembre de 2013. De acuerdo con los criterios establecidos por ACCECISO, este proceso consideró 11 rubros: Contexto regional e institucional; Planeación y organización de la Unidad; Personal Académico; Plan y Programa de Estudio; Proceso Enseñanza-Aprendizaje; Alumnado; Trayectoria Escolar; Investigación; Difusión, intercambio, vinculación y educación continua; Infraestructura y equipamiento;  Administración y financiamiento de la unidad.

El pasado 5 de marzo, fue entregado el documento que reacredita la calidad académica del Programa de la Licenciatura en Administración Pública de la Universidad de Sonora. De nueva cuenta, se reconoce el trabajo de la planta docente de este programa. La participación de los profesores miembros de la Academia y el Grupo Disciplinar de Administración Pública, como en el primer proceso de acreditación, fue fundamental en el logro de este objetivo.

Por cubrir los requisitos de calidad educativa establecidos por ACCECISO, la reacreditación del programa se dio por el periodo del 14 de febrero de 2014 al 14 de febrero de 2019.
 

UGOLINO. La fiera hambrienta frente a la razón y el amor

Hermosillo Sonora, Abril 16 de 2014.

Ciego, busqué sus cuerpos macilentos...
Tres días los llamé desatentado...
¡El hambre sofocó los sentimientos!
 
Dante Alighieri. La Divina Comedia
El Infierno — Canto XXXIII. vv. 75

Entre las sombras, arrastrándose entre los cuerpos yacentes de sus hijos, Ugolino expresa su desazón por la muerte de su progenie, un dolor profundo, tal vez, incluso, remordimiento, por la suerte que ha corrido en aquella mazmorra en la que, para sobrevivir, ha tenido que acudir a la carne de sus seres queridos, hijos y nietos, como alimento, cual perro cuyos ojos torvos denotan su naturaleza más bestial que humana.
 
El conde Ugolino, uno de los traidores de la patria, cuya historia es narrada en uno de los cantos más conocidos del Infierno de la Divina Comedia de Dante Alighieri, es el tema que Auguste Rodin escogió para sustituir la escultura de El Beso, que, en el complejo de sus Puertas del Infierno, La Porte de l'Enfer, resultaba una escena muy agradable y luminosa como para integrarse a su mayor proyecto escultórico. El drama de Ugolino della Gherardesca resultaba para Rodin un tema más propio dentro de aquel esquema dantesco; además, el tema del romance adúltero de Francesca de Rimini y Paolo Malatesta, sería incorporado al pie de la escultura de Ugolino en la composición Fugit Amor, conocida también como Paolo y Francesca. Encargado por el Ministerio de Arte y Cultura del gobierno francés en 1880, el trabajo de las Puertas, tendría como tema la Comedia de Dante, si bien, más adelante el mismo artista integraría otros temas derivados de la obra poética de Baudelaire (Néret, 1994: 11).
 
Durante el desarrollo de las Puertas, y como ocurrió con otras esculturas que Rodin fue incorporando a su proyecto, Ugolino y sus hijos fue sacado de su contexto para ser presentado como una escultura con características propias, cuyo tema y la composición misma ofrece al observador la posibilidad para la reflexión acerca de la naturaleza humana. Como parte de las Puertas del Infierno, nunca ocupó el lugar para el que se pensó, el Musée des Arts Décoratifs. A la muerte del escultor en 1917, el original en yeso se ubicó en el Museo de Orsay y tres originales en bronce se destinaron al Museo Rodin en París, al Museo del mismo nombre en Filadelfia y al Museo Nacional de Arte Occidental de Tokio. Otros ejemplares de la obra se encuentran en Zurich, Seúl, Shisuoka, Barcelona y en California. La escultura de Ugolino, también como parte del patrón de trabajo de Rodin, fue elaborada en varias dimensiones y materiales; la ubicación de estas obras es, por lo general, en las salas de los museos de todo el mundo. El Musée Rodin de Paris alberga en sus jardines una reproducción en bronce de 134 x 140 x 194 cm., versión tres veces superior a la de las Puertas, de 40.3 x 41.5 x 58.7 cm. Además del bronce y el yeso, la obra también fue elaborada en terracota.
 
Auguste Rodin. Ugolino. En las Puertas del Infierno. Entre 1882 y 1906
 
 Antes que Rodin, otros artistas plásticos abordaron el tema del encierro del Conde Ugolino; del siglo XIX se conocen varios trabajos sobre este tema. Johann Heinrich Füssli, pintor suizo (se le señala como simbolista, neoclásico y prerromántico), pintó en 1806 Ugolino y sus hijos muriendo de hambre en la Torre, donde se presenta a Ugolino sentado, sosteniendo en su regazo el cuerpo de uno de sus hijos, mientras que los otros meditan y sufren el tormento del hambre. El pintor inglés William Blake, perteneciente al movimiento simbolista, realizó hacia 1826 la pintura Ugolino y sus hijos en su celda, como parte de la ilustración que hizo de la obra de Dante; en dicha obra se ve al conde y a sus hijos exhaustos por el encierro y la falta de alimento, resignados a su tragedia y custodiados por dos ángeles que flotan sobre ellos. De este período también se encuentran los dos trabajos gráficos del italiano Francesco Scaramuzza que datan de 1859 y, por supuesto, los grabados del francés Gustave Doré quien ilustró la Divina Comedia de Dante, dedicando tres láminas al tema de Ugolino. 
 
Francesco Scaramuzza. Conte Ugolino. 1859
 
Sin embargo, la obra que más impactó a Rodin fue la majestuosa escultura de su compatriota Jean-Baptiste Carpeaux, Ugolino. Esculpida entre 1857 y 1861, la obra de Carpeaux fue admirada por Rodin durante su exposición, lo que lo motivó a acercarse a Carpeaux sin éxito.  Ambos artistas profesaban admiración y respeto por las obras de la Grecia clásica y del Renacentista Miguel Ángel: Carpeuax reconoció la influencia del Laocoonte griego y a la obra del florentino; por su parte, Rodin, era un admirador ferviente de la escultura de Fidias y de la del creador del David y el Moisés.
 
Veinte años después de que Carpeaux diera vida a su Ugolino, con el encargo de las Puertas del Infierno, Rodin tuvo el pretexto para recrear la tragedia del conde italiano. Realizó diversos dibujos preparatorios, buscando inspiración entre los antiguos; entre las ideas preliminares incluyó el presentar a Ugolino sosteniendo en sus piernas a uno de sus hijos, como lo hizo Miguel Ángel en la Piedad (imagen que también retomó Füssli).
 
Johann Heinrich Füssli. Ugolino y sus hijos muriendo de hambre en la Torre. 1806
 
El dramatismo es un elemento fundamental de las obras de los dos escultores franceses. Enmarcado en el movimiento realista, el trabajo de Carpeaux asume una estructura piramidal, teniendo la figura angustiada de Ugolino como centro de la composición a cuyos lados se agrupan los cuerpos de sus hijos y nietos, dos jóvenes aferrados al cuerpo del padre comparten su desesperación, los más jóvenes sufren los estragos de la inanición, uno de ellos desfallece acurrucado al cuerpo del conde. El conde Ugolino es impotente ante la situación que vive, se muerde las dedos como si quisiera que su cuerpo fuese su alimento y no el de sus hijos, como lo desean sus carcelarios y lo imploran de alguna manera los jóvenes que desena que su progenitor sobreviva al tormento, aun a costa de su propia vida. Es el momento previo en el que Ugolino decidirá su suerte, sabe que sus hijos están muriendo y él tendrá que optar por morir como ellos o salvarse con la carne de los jóvenes cuerpos. Es notoria la tensión del cuerpo del padre y la flacidez que presenta sus hijos moribundos. La naturaleza humana enfrenta el dilema en un mar de pasiones, el discernimiento es castigado al extremo por el dolor fraterno, pero también por el dolor material y vulgar que deriva del hambre. Parece que la luz puede imponerse a las sombras.
 
Jean-Baptiste Carpeaux, Ugolino. Entre 1857 y 1861
 
Cuando el escritor, periodista y crítico de arte Octave Mirbeau vio por primera vez las Puertas del Infierno en el estudio de Rodin, publicó, el 18 de febrero de 1885 en La France, un artículo donde describió su impresión sobre esa obra escultórica. Respecto al grupo escultórico de Ugolino, dijo que no había en la obra de Rodin nada más aterrador que la escena del padre arrastrándose como hiena entre los cuerpos inertes de sus hijos; reconoce que Ugolino se ha inspirado en el poema italiano, pero advierte que no es posible calcular la imaginación desplegada por el artista para disponer cada cabeza y cada cuerpo a fin de dotarlos de la expresión y actitud que envuelve la tragedia del grupo (Elsen, 1985: 123).
 
El Ugolino de Rodin ha sido modelado en un formato considerablemente menor que el de la obra de Carpeaux, sin embargo la impresión que provoca es terrible, más desgarradora que la de la obra de su compatriota. Los huesos sobresalen debajo de la piel del conde, con la boca abierta parece babear de hambre como una fiera salvaje que tiene a su merced los cadáveres en descomposición de sus hijos caídos. Como reflejo del modo en que Rodin trabaja los cuerpos de sus obras, el proceso de “ensamblado” de torsos, cabezas y extremidades hace más patética la imagen que nos ofrece de la tragedia del noble italiano caído en desgracia. Parece que Ugolino ya ha tomado una decisión. Las sombras se imponen a la luz. La fiera hambrienta se impone a la razón y el amor. Ugolino se ha despojado de toda dignidad humana.
 
Auguste Rodin. Ugolino. Entre 1882 y 1906
 
Referencias:
Alighieri, Dante. 1894. La Divina Comedia. Traducción en verso ajustada al original con nuevos comentarios. Buenos Aires: Editor: Jacobo Peuser.
Elsen, Albert Edward. 1985. The Gates of Hell by Auguste Rodin. Redwood City: Stanford University Press.
García Ponce de León, Paz. 2013. Rodin. Precursor de la escultura moderna. Madrid: LIBSA Editorial.
Néret, Gilles. 1994. “Auguste Rodin. Las pasiones humanas en bronce y en mármol”. Ensayo publicado en el libro Auguste Rodin. Esculturas y dibujos. Oldenburgo: Benedikt Taschen Editorial. Pp. 7-13.
The World of Dante: http://www.worldofdante.org/ : Rodin Works: Ugolino and his Sons

miércoles, 16 de abril de 2014

Francisco Javier Bello Quiroga. Doctor en Administración Pública


Hermosillo Sonora, Abril 16 de 2014.

El pasado 10 de diciembre de 2013, el profesor Francisco Javier Bello Quiroga recibió el grado de Doctor en Administración Pública por el Instituto Sonorense de Administración Pública, A.C. y el Instituto de Administración Pública de Veracruz, A. C. Miembro de la Academia y del Grupo Disciplinario de Administración Pública, alcanzó este grado académico con la investigación titulada Gestión de Programas Sociales en Sonora 2003-2015 y Estudio de la Gestión Social y la Participación Ciudadana.
 
La participación ciudadana es una temática que el profesor Bello Quiroga ha venido cultivando en los últimos años, entre las líneas de investigación del Programa de Administración Pública de la Universidad de Sonora. Interesado en los ámbitos estatal y municipal, otros productos de su trabajo intelectual hacen referencia al cambio institucional y al diseño de políticas públicas para impulsar el desarrollo local.
 
La pauta del trabajo de investigación fue trazada en razón del propósito de identificar y analizar los programas de desarrollo social impulsados por el gobierno del estado de Sonora desde el año 2003, poniendo atención a la manera en que la sociedad participa en la confección, implementación y seguimiento de dichos programas.
 
La estrategia que se ha seguido en este trabajo nos permite observar la dialéctica entre gobierno y gobernados, la cual se comprende en la definición de los programas de desarrollo social que se han proyectado para dos periodos sexenales, en el orden federal, estatal y municipal. El profesor Bello Quiroga ha planteado esta relación a partir del marco institucional -jurídico, programático y de colaboración intergubernamental-, que sirve de base para la confección de programas sociales, su implementación y evaluación.
 
De acuerdo con el profesor Bello Quiroga, en el espacio público debe prevalecer el diálogo entre las fuerzas sociales y políticas y los tres órdenes de gobierno en los que se manifiesta el Estado mexicano. La confección de verdaderas políticas públicas debe incluir tanto la racionalidad gubernamental como la participación ciudadana. Así, cuando el gobierno omite el componente de publicidad en sus programas, éstos dejan de ser considerados como políticas públicas, reduciéndose a políticas de gobierno que en un extremo pueden llegar a ser solo medidas de gobierno propias de los Estados autoritarios.

 


miércoles, 2 de abril de 2014

La Evaluación Ex-Post de los Proyectos


AOA. 2013 Tzompantli Posmoderno

Hermosillo Sonora, Abril 1 de 2014.
 
 
De la importancia de la Evaluación

En su obra Administración Industrial y General (1916), Henri Fayol distinguió seis funciones básicas presentes en cualquier tipo de organización: las funciones técnicas, comerciales, financieras, de seguridad, contables y administrativas. Estas últimas las consideró como las más importantes en el sentido de que permiten la coordinación y sincronía de las demás funciones, orientando el trabajo organizacional en el logro del objetivo básico de generar los mayores índices de productividad y, por consecuencia, de beneficio económico para la empresa.

Para Fayol, las funciones administrativas comprenden la labor de prever, organizar, mandar, coordinar y controlar; tales funciones presentan una unidad procesal cuyo cumplimiento permite el logro de objetivos y metas. Esta propuesta fue desarrollada posteriormente mediante la categoría que conocemos como el Proceso Administrativo.

La manera de verificar que el plan original de la organización sea haya cubierto y alcanzados los objetivos y metas preestablecidos se da por medio de la función de Control; el empleo de instrumentos y sistemas de control permite evaluar resultados, rendimientos e impactos. Se mide y evalúa con el fin de determinar si se cumplieron con los objetivos y metas del organismo y sus departamentos; se verifica que la estrategia prevista se lleva a cabo o si una vez concluido el proyecto dicha estrategia se llevó en los términos previstos; la evaluación también permite corregir rumbos desviados o fallas en el proceso; sirve para evaluar alternativas emergentes que se emplean para mejorar procesos y resultados; también permite evaluar el desempeño de áreas, programas, proyectos, procesos, políticas y personas; incluso, la evaluación se convierte en un referente para recompensar o castigar cuando se ha cumplido o bien se falló en la realización de las funciones y procesos encomendados.


La Evaluación Ex-Post

Como lo propone el Profesor Juan José Miranda en su obra Gestión de Proyectos (2010: 32-33), la evaluación ex-post “…tiene como objetivo principal verificar los impactos y resultados de la operación frente a lo programado inicialmente, con el fin de guiar la formulación y elaboración de nuevos proyectos.”

Como parte de la función de control es posible distinguir tres momentos de la evaluación, la previa o Ex-Ante, la que se realiza Durante el Proceso, y la final o Ex-Post. Analizadas las dos primeras por el autor, plantea que la evaluación Ex-Ante busca “…determinar mediante la aplicación de técnicas cuantitativas y/o cualitativas la conveniencia o no, de asignar recursos hacia un uso determinado” (2010: 20), en tanto que la evaluación en Proceso “…se orienta a verificar y corregir, cuando se crea conveniente, la forma en que se asignan los recursos (2010: 25).

La evaluación se concibe como un proceso dinámico y permanente. Su pretensión es aportar a la racionalización del trabajo en las organizaciones, ello mediante el estudio, análisis, revisión y comprobación sistemática de los resultados generados en relación con los objetivos organizacionales deseables. Los tres tipos de evaluación señalados se integran desde el inicio del proceso administrativo para hacer posible dicho cometido.

En relación con la evaluación Ex-Post, se le ve como la evaluación requerida en el momento que concluye cada etapa del Ciclo del Proyecto: la evaluación en la etapa de ejecución sirve para analizar cada fase previa, como la identificación y determinación del perfil del proyecto, la formulación, la evaluación, la negociación hasta la conclusión de la fase de ejecución, en tanto que al concluir la etapa de operación del proyecto, la evaluación ayuda a reconocer los resultados del proyecto y determinar su éxito o fracaso.

Por consecuencia, sin que ello implique el monitoreo continuo de las acciones llevadas a cabo durante el Ciclo del Proyecto, su aplicación al cierre de cada fase permite a los decisores contar con elementos para ponderar la pertinencia de continuar con lo realizado, hacer ajustes o, incluso, determinar si es conveniente hacer cambios radicales o bien terminar con el proyecto.

La evaluación Ex-Post retroalimenta: representa conocimiento y experiencia para valorar los proyectos y sus impactos en los diferentes sectores del desarrollo implicados, así como la calidad de la gestión de los responsables de su formulación, ejecución y operación.


La Evaluación Ex-Post y la Terminación de Proyectos

Con relación a los proyectos gubernamentales se hacen señalamientos de que en ciertos casos la evaluación Ex-Post es poco útil, si no es que sólo sirve para cumplir formalmente con los requisitos de informar a las instancias de control. Por ejemplo, en razón de la evaluación del desempeño de los servidores públicos o el de los organismos involucrados en la realización de los proyectos, se observa que los resultados de la evaluación sirven poco a la sanción de la acción, en los términos de que se recompense el éxito o se castigue la omisión, el incumplimiento y los errores.

Por otra parte, cuando se relaciona la evaluación con los procesos políticos que regularmente se observan en las acciones de gobierno, se cuestiona que el destino de las evidencias que recoge la evaluación sea el de su “maquillaje” o bien la “congelación” de los dictámenes que de ellas derivan. Incluso, los calendarios de renovación de las administraciones en los tres ámbitos de gobierno –federal, estatal y municipal– se constituyen en fechas en que programas y proyectos de gobierno se ven amenazados de ser terminados sin una evaluación que fije ese destino.
 

El Arte del Renacimiento

Leonardo Da Vinci. Autorretrato. El hombre del Vitrubio

Hermosillo Sonora, Abril 1 de 2014.

Raymond Bayer, en su Historia de la estética (2011), brinda una magnífica visión del cambio ideológico que surge con el Renacimiento, particularmente lo que sucede durante el Quattrocento italiano, del cual apunta:
 
“Al rigor fijo de la tradición le suceden, en los albores del Quattrocento, los tanteos de la inteligencia. La tranquila y beata certidumbre de los últimos giottistas se esfumó. Se vive en Florencia una aventura de la ciencia, una sed de descubrimientos que conduce todo aquello que tenía que ver en la creación artística directamente del arcaísmo al clasicismo. Y este surgimiento de descubrimientos constituye la juventud misma y la fisonomía del nuevo siglo. Tales hallazgos acompañarán en Florencia la fuerte tendencia hacia un naturalismo sui géneris que revelará características propias.
Al llegar a su fin el giottismo, desaparece la pintura espontáneamente cristiana. Los objetivos del arte se hacen autónomos, el arte se independiza y se convierte en laico, como puede verse en Masaccio. De aquí nace la pintura que representa figuras por ellas mismas. Se requiera la enseñanza de los maestros pintores, no ya de los teólogos. Los papas no tardarán en favorecer una pintura que tomará a la religión como mero pretexto. La predicación cede la pintura a la estética. Suele citarse a Perugino (1446-1524), quien jamás quiso creer en la inmortalidad del alma, y a Leonardo (1452-1519), quien deseó recibir la instrucción de la fe católica apenas en su lecho de muerte.
El gusto por el mundo sensible es decisivo. El universo material, de ahora en adelante, inspira amor por sí mismo y ya no como lenguaje simbólico. A esto se debe la primera conquista de Florencia: el cuerpo y la figura humanos.” (Bayer, 2011: 101)
 
El artista, surge independiente, con su individualidad, personalidad e intereses estéticos propios. Su labor es motivo de contrato, tanto por religiosos como por civiles. El mecenazgo propicia el desarrollo de los talleres en donde los aprendices reciben la lección de los artistas. La creación artística es resultado de la conjugación de la imaginación, la memoria y el razonamiento: sus temas son la naturaleza y el realismo, si bien se incorporan alguna dosis de idealismo y las creencias religiosas aún poderosas en la mente de la población. La incredulidad, investigación, contrastación, inventiva, etc. son los métodos que dan rumbo a la labor de los artistas del renacimiento. Se busca explicar por métodos racionales y mediante la experimentación aplicar los nuevos conocimientos.
 
Andrea del Verrocchio. Retrato de Lorenzo El Magnífico

Con la aparición de la clase burguesa también surge la cuantificación y medición de todo lo que rodea y tiene que ver con el hombre. Es fundamental cuantificar las ganancias, los costos, mercancías, y sus ventas. Hay que medir los territorios de los que son propietarios, distancias a recorrer en la movilización de las mercancías, pesar tanto insumos como productos, evaluar desempeños de los proceso, instrumentos e incluso de la acción humano.
 
La duda respecto a los actos de fe, de los pecados originales y otras creencias, ritos y explicaciones dogmáticas plantea explicaciones basadas en los hechos y la certeza de los fenómenos concretos. Qué produce las enfermedades, por qué los problemas con los cultivos, qué es lo que explica el cambio climático o el movimiento de los astros de su posición en la bóveda celeste, o bien de qué manera se explica el vuelo de las aves, o cómo levantar edificios o murallas que sirvan tanto de cobijo como de seguridad ante el acoso de invasores. Preguntas que requieren de respuestas, y respuestas que han de ser útiles para la vida humana en todos sus campos de manifestación, esto es lo que surge con el Renacimiento.
 
Por ello, en el plano político se vuelve necesario cambiar el esquema segmentado de la organización feudal por otro centralizado basado en el poder de un monarca fuerte, basado en leyes y capaz de movilizar a la población en torno a la idea del Estado nación emergente.
 
A partir del Siglo XV, opera una revolución tecnológica, con grandes inventos como la brújula, imprescindible para los nuevos descubrimientos y colonizaciones en ámbitos ultramarinos; el telescopio que ubica al hombre en su pequeñez frente al universo y que le permite conocer a la distancia más de su propio mundo, cambiando su visión geocentrista por otra donde el sol asume el papel relevante.
 
En lo militar, el uso de la pólvora propicia una revolución en estrategias y en el dominio de la guerra, plantea, además, la generación de nuevas armas bélicas. La cultura escrita antes restringida a los monasterios, será exponenciada con la creación de la imprenta por Gutenberg, permitiendo el acceso a mayores segmentos de la población, volviéndose secular y propiciando la creación de instituciones educativas.
 
Museo Gutenberg, Alemania. Réplica de la Imprenta de Gutenberg

Al concluir el siglo XIII algunos artistas tomaron conciencia del legado dejado por Grecia. Se le tenía como una de las épocas más importantes del arte occidental por la estética que fue desarrollada, donde el interés por la perfección y el cuidado de las obras que se habían conservado o recuperado dejaban claro que representaban un mejor ejemplo que el que podía desprenderse de las obras medievales, poco interesadas en el cuidado, composición, proporción y perspectiva tanto en la pintura como en la escultura.

A lo largo de dos siglos, el interés por recuperar los ideales de la cultura helenística se constituirá en un proceso lento, pero cuidado, en el que se hilan desarrollos estéticos, conceptuales y técnicos sobre el arte. Este entramado inicia, como preámbulo, con Giotto, y culmina con las manifestaciones manieristas iniciadas en los trabajos de Miguel Ángel Buonarroti.
 
Giotto di Bondone. Maestà di Ognissanti (c. 1310)

Giotto di Bondone (1267-1337) es considerado el antecesor del Renacimiento. Se reconocen en sus pinturas el trato tridimensional de sus composiciones, el manejo de expresiones faciales, de sombras y de sus drapeados. Dio pie al denominado Proto-Renacimiento representado por artistas como Duccio Bonnsegna, Simnoe Martini, los hermanos Pietro y Ambrogio Lorenzetti.
 
La reconfiguración del Arte, en particular la pintura y la escultura, ocurre en Italia. El Renacimiento, según Giorgio Vasari, representa el nuevo nacimiento del arte antiguo; con él se renueva la cultura de la antigüedad clásica, y se pretende superar la “edad oscura” que significa la Edad Media.
 
Para analizar este importante periodo de la historia del Arte, los especialistas han precisado dos grandes periodos de análisis: el Primer Renacimiento o Renacimiento del Quattrocento que comprende el siglo XV, y el Segundo Renacimiento, conocido también como Alto Renacimiento o Renacimiento del Cinquecento, el cual comprende de fines del siglo XV a las primeras décadas del siglo XVI.
 
Durante el Quattrocento italiano se inicia la distinción respecto al Gótico, dándose mayor importancia a lo figurativo, la perspectiva y la proporción del cuerpo humano. La plenitud del Renacimiento se encontrará en el Cinquecento.
 
Michelangelo Buonarroti. Pietà. 1498-1499

Con el propósito de contar con una visión general de estos dos momentos del Renacimiento, en el siguiente cuadro comparativo se presentan los rasgos característicos de cada uno de ellos.


Cuadro comparativo entre la pintura del primer y el segundo Renacimiento
Característica
Primer Renacimiento o Quattrocento
Segundo Renacimiento o Cinquecento
Periodo
Siglo XV
Fines del Siglo XV y principios del Siglo XVI
Artistas
Tommaso di ser Giovanni di Mone Cassai Masaccio (1401-1428)
Fra Angelico (1387-1455)
Paolo Uccello (1397-1475)
Filippo Lippi (1406-1469)
Sandro Botticelli (1445-1510)
 Domenico Ghirlandaio (1449-1494)
Andrea Mantegna (1431-1506)
Piero della Francesca (1415-1492)
Leonardo Da Vinci (1452-1519)
Miguel Ángel Buonarroti (1475-1564)
Rafael de Sanzio (1483-1520)
 
Estilo
§ Se distingue del Gótico, introduce la perspectiva y la proporción humana.
§ Inicia la recuperación del ideal clásico.
§ Incluyen temas religiosos e introducen la alegoría, la mitología y el retrato.
§ Inicia el análisis científico de la perspectiva y el espacio tridimensional.
§ Se abandona la rigidez gótica y se trabaja la figura humana.
§ Empieza a incluirse la naturaleza como fondo de las composiciones.
§ Se introducen los desnudos.
§ Etapa culminante de la pintura renacentista, denominada Clasicismo.
§ Los pintores asimilan las novedades y la experimentación cuatrocentistas y las llevan a niveles más amplios y creativos.
§ Aparecen los grandes maestros, cuyo trabajo será modelo a los artistas durante siglos.
§ El primer maestro es Leonardo, artista multidisciplinar, intelectual y obsesionado con la perfección.
§ Aportó innovaciones como el sfumato o claroscuro, la delicada gradación de la luz que otorga a sus pinturas una gran naturalidad, a la vez que ayuda a crear espacio, así como la importancia que da al paisaje en sus composiciones (el doble paisaje para ambientar y crear perspectivas)
§ Desarrolla el estudio científico en sus composiciones e incluye el simbolismo y misterio en sus obras.
§ El otro gran genio de este periodo es Miguel Ángel, el más grande escultor que trascendió en el campo de la pintura y la arquitectura.
§ El hombre es centro de las esculturas y pinturas  
§ Hace un uso depurado de las proporciones y el manejo anatómico de los cuerpos desnudos.
§ Los frescos de la Capilla Sixtina, además de su valor estético, dejan ver su visión del mundo y externan su atormentado mundo interior.
§ Rafael de Sanzio, según Vasari, completa la triada de genios del Clasismo.
§ Su pintura se interesa en la grazia o belleza equilibrada o serena.
§ Muerto muy joven, sus madonas incorporan las innovaciones de Leonardo en cuanto a composición y manejo del claroscuro.
§ Sus últimas obras influyen en el surgimiento del manierismo.
§ A partir de la tercera década del siglo XVI surge el Manierismo, contando con reconocidos pintores como Pontormo, Bronzino, Salviati y Parmigianino. En esta perspectiva, pero con un estilo más clásico se encuentran Corregio, Andrea del Sarto y Sebastiano del Piombo.
§ En Venecia se desarrollará una escuela cuyo interés será el color y el retrato. Artistas representativos son Giovani Bellini y Giorgione como precursores, Tiziano como el gran artista de esta escuela, y TIntoretto, Veronese y Palma el Viejo, quienes en la última etapa profundizarán en el manejo del color y la luz, y pasarán del manierismo al barroco.
Lugares
Florencia
Padua
Venecia
Umbría
Florencia
Roma
Venecia